Y con la de 2016-1, ya son ocho finales consecutivas que se juegan en esa ciudad. Tanto Atlético Nacional como Independiente Medellín se han destacado en los últimos años y han estado presente en el juego decisivo.
La última vez que se definió un título sin jugarse en Medellín fue en junio de 2012, cuando Santa Fe derrotó a Deportivo Pasto. De ahí en adelante, la final hizo tránsito por la capital de Antioquia.
La primera de las finales jugadas en línea en Medellín fue la del DIM y Millonarios en diciembre de 2012, cuando el equipo capitalino obtuvo la estrella 14. En Antioquia quedaron 0-0 y en Bogotá 1-1, pero en penales ganaron los azules.
El 2013 fue el año de Nacional, quien de la mano de Juan Carlos Osorio quedó campeón los dos semestres: el primero en una reñida definición contra Santa Fe, donde se impuso el verde en El Campín 2-0, luego de igualar 0-0 en el Atanasio. En la segunda mitad del año el rival fue Deportivo Cali y lo derrotó por igual marcador, pero esta vez en Medellín.
En 2014-1 de nuevo el campeón fue Nacional que, tras perder 1-0 en el Metropolitano contra Junior, ganó agónicamente 2-1 en casa y se alzó con la estrella en penales.
Seis meses después el Atanasio volvió a recibir la final, pero esta vez fue Medellín el que llegó a esa instancia. Sin embargo, la perdió contra Santa Fe con global de 3-2.
El poderoso disputó el título del 2015-1 contra Deportivo Cali, con tan mala suerte que, esta vez terminando en el Atanasio, tampoco se pudo consagrar. En Cali quedaron 1-0 a favor de los locales y en Medellín, 1-1.
La última estrella que se otorgó se la llevó Atlético Nacional en el segundo semestre del 2015, cuando de nuevo venció a Junior y de nuevo por penaltis. La ciudad de Medellín fue testigo de un nuevo récord, pues los verdolagas se proclamaron los más veces campeones del país, superando a Millonarios.
Este domingo, por octava vez consecutiva, Medellín será sede de una de las finales del torneo, ahora con Medellín y Junior como protagonistas. Se trata de dos equipos que si bien fueron protagonistas en esas ocho ocasiones, nunca pudieron gritar campeón. Ahora es el turno.
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