El expresidente de la Federación Colombiana de Fútbol aseguró, citado por Caracol Radio, medio que a su vez evoca palabras del periodista Ken Besinger, presente en el lugar:
“Acepté sobornos aproximadamente desde 2007 hasta 2015, me entregué voluntariamente al gobierno de Estados Unidos en 2015 sin tener aún cargos en mi contra”
Bedoya, según la emisora, afirmó que los sobornos provinieron de parte de Marino Jinkis, codueño de la empresa Full Play —con la que el exdirectivo explicó que Colfútbol tenía contrato— “para que esta obtuviera los derechos de la Copa América Argentina 2011”, señala Caracol Radio.
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Jinkis le habría ofrecido un millón de dólares a cada uno de los presidentes de las federaciones de fútbol de Colombia, Perú, Venezuela, Ecuador, Chile y Paraguay. Estos se habrían pagado en dos cuotas de medio millón cada una.
La idea de dicha coima era sacar del paso a Traffic, firma brasileña que antes poseía los derechos de transmisión de la Copa.
Hace algunos días, el ex CEO de la firma Torneos y Competencias Alejandro Burzaco había señalado que Bedoya recibió mensualmente sobornos entre los 400 y 600 mil dólares para obtener la adjudicación de derechos de diferentes torneos en Suramérica.
Así mismo, Bedoya reveló que durante la final de la Liga de Campeones 2010, un empresario catarí se acercó a él y al expresidente de Conmebol Juan Ángel Napout, por intermedio del mismo Jinkis, para conocer si contaba con el respaldo de la confederación para obtener la sede del Mundial Catar 2022.
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