Los 44 años de trayectoria que alcanzó lo llevaron a completar una fortuna que superaría los 30 millones de dólares (cerca de 90 mil millones de pesos colombianos), según Celebritynetwort.com.
Sin embargo, es muy posible que la cifra total de fortuna sea mayor, entre otras cosas, porque en 2016 Juan Gabriel ocupó el lugar 18 entre los músicos más ricos del mundo, con un ingreso de 11 millones de dólares solo en 2015 y ventas por 430.000 dólares, según Forbes Brasil.
De acuerdo con la Academia Latina de la Grabación (Laras), entre las cifras más representativas de la exitosa carrera del cantante mexicano se destacan los más de 100 millones de discos que logró y las más de 1.500 canciones que compuso.
Otras cuentas que se deben hacer a la hora de calcular la fortuna que deja el Divo de Juárez, que falleció a los 66 años, es el valor que cobraba por cada concierto. Según Tv y Novelas, junto con Luis Miguel eran los artistas mejor pagados con cobro por presentación cercano al millón de dólares; sin embargo, concedían precios especiales si se realizaban varios conciertos en una misma ciudad.
En teoría, los herederos de su fortuna serían sus 4 hijos: Iván, Jean, Joan y Jans. Sin embargo, afirma Perú.com, la relación que Juan Gabriel tenía con ellos no era la mejor.
Una situación especial la vive Joan, que fue condenado en Estados Unidos por manejar en estado de embriaguez. “Juan Gabriel, a mediados de 2015, no solo desheredó a Joan sino que decidió dejarlo en la cárcel para que aprenda la lección y no vuelva a cometer los errores por los que fue sentenciado”, afirma ese mismo portal peruano.
Con el que mejores relaciones tenía el cantante era con Iván. Incluso, afirman medios mexicanos, en el testamento dispuso que él herede todos sus bienes y le encargo la responsabilidad de hacerse cargo de la rentabilidad y derechos de sus canciones compuestas.
Previo a su muerte, Juan Gabriel se encargó de evitar que Simona Hacman, esposa de Iván y 10 años mayor que él, no pudiera quedarse con su fortuna, en caso tal de que existiera un divorcio, sostiene Prensa Libre.
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