Lamont Richmond, el hombre que protagonizó la gresca con el cantante canadiense, expresó su deseo de reunirse cara a cara con Bieber para dar por terminada la polémica. Esa es la única condición que pone para no llevar a cabo una demanda, informa TMZ.

La solicitud, de hecho, podría favorecer a Bieber, ya que Richmond propone aceptar parte de la culpa, aunque solo lo haría si el joven cantante hace lo propio.

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La demanda podría sustentarse en el hecho de que Richmond fue despedido de su trabajo tras el incidente y ha recibido amenazas de muerte de parte de varios ‘Bieliebers’, seguidores del intérprete de 22 años.

Por ahora no se conoce una respuesta oficial de Bieber, pero, así las cosas, definitivamente le conviene reunirse con su contendiente para no agudizar la crisis que lo podría alejar de la música por algún tiempo.

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