Evel Antonio Jiménez Centeno, como era su nombre inicialmente nació en Venezuela pero fue entregado por sus padres a una tía que vivía en Villanueva, Guajira, noticia que supo a los 15 años, cuando cambió su nombre por Jean Carlos Centeno.
En los años 90 se convirtió en cantante de vallenato y fue cuando conoció al maestro Israel Romero, quien le propuso ser la nueva voz del Binomio de Oro y desde entonces su carrera se impulsó hacia el éxito.
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Jean Carlos permaneció 12 años con la agrupación hasta que empezó a tener problemas con el líder porque no estaba de acuerdo con el pago que recibía, por lo que decidió renunciar e iniciar su carrera como solista.
En entrevista con el programa ‘Se dice de mí’, contó algunas de las anécdotas que tuvo que vivir con El Binomio de Oro, pues en alguna ocasión tuvo que cumplir con los caprichos de una de las personas que los había contratado, sentándose en sus piernas para cantarle, pues tenía miedo que de no hacerlo pudieran atentar contra su integridad, pues el hombre estaba con sus guardaespaldas armados.
Su relación con el acordeonero Israel Romero ha estado llena de conflictos desde que decidió retirarse de la agrupación que le dio la fama.
El cantante también aseguró que en casi pierde la voz por la falta de descanso ante el exceso de trabajo que tenía con la agrupación, pues llegaron a tener 14 conciertos en 5 días.
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La disfonía que empezó a sufrir lo llevaron a consultar a médicos profesionales que le descubrieron un pólipo en la garganta que le estaba afectando las cuerdas vocales, por lo que tuvo que operarse.
Sin embargo, al no cumplió con la incapacidad que le habían exigido, porque al poco tiempo ya estaba cantando debido a los compromisos del grupo, tuvo que someterse a una segunda cirugía con el riesgo de quedar mudo, disfonico de por vida o con problemas en la voz.
Según cuenta Juan Carlos, en aquel momento Ismael no le creía y no se preocupaba por su salud, pues solo le interesaba cumplir con los compromisos que tenía El Binomio de Oro.
En cuanto a su relación con Marbelle, dice que no le compuso ninguna canción y que ella se enamoró demasiado de él.
Contrario a eso confesó que Wendy, la hija de Rafael Orozco, fue su inspiración en temas como ‘Locamente enamorado’, ‘Me vas a extrañar’ y ‘Me ilusioné’.
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