Adam BarkWorth es un niño de 17 años, habitante de StockPort, Inglaterra, que durante 5 años ha preferido quedarse dentro de su casa, jugando en su habitación, porque salir a la calle le producía ataques de ansiedad.
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Pero desde que Pokémon GO llegó a su vida, no solo ha sido capaz de salir de la casa con su madre y su perro, sino que también ha podido estar en lugares públicos con otras personas.
“Es como si hubiera recuperado un poquito a mi hijo”, dijo su madre a la BBC, mientras explica que poder salir con Adam la ha ayudado a mejorar el vínculo con él.
Al otro lado del Atlántico, en EE. UU., un niño llamado Ty, también jugador de Pokémon GO, recibió una muestra de bondad de varios extraños que fueron a jugar con él luego de que su hermana denunciara en Facebook que dos jóvenes se habían burlado de él mientras jugaba, lo habían llamado ‘retrasado’ y les lanzaron a él y su madre salsa BBQ.
De acuerdo con el Huffington Post, la publicación generó tantos comentarios de apoyo, que algunos decidieron invitar al niño a jugar con él en el mismo parque donde había sido matoneado.
Algunos le llevaron regalos, como camisetas de Pokémon y un Pikachú de peluche.
“Estoy muy agradecida porque si esto no hubiera pasado, todavía estaríamos sentados en casa como hacen muchas familias como la nuestra. Y no puedo agradecerles lo suficiente”, dijo la madre del joven, Angie Swartout, a ABC 15.
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