Mientras muestra imágenes de parejas exguerrilleras junto con sus hijos o futuros bebés, The Guardian cuenta que antes de las negociaciones, las mujeres de las Farc tenían prohibido quedar embarazadas, ya que en ese estado, o luego de dar a luz, ellas y sus bebés representaban un riesgo para la seguridad de la organización subversiva.
Las Farc las obligaban a tomar anticonceptivos e, incluso, “abortar hasta los 8 meses”, detalló el medio.
Aquellas que, de una u otra forma, lograban continuar con su embarazo, “eran obligadas a enviar sus bebés a familiares”, añadió.
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“Ser mamá no es fácil, y más en la situación de uno. Por ejemplo, yo llevo 17 años interna”, dijo Carolina, de 33 años, quien tuvo un hijo en medio del conflicto.
Actualmente, el escenario es distinto, debido a que la guerrilla dejó de ser un grupo armado, después de más de 50 años de guerra.
Entonces, las excombatientes pueden soñar con ser madres y tener a sus bebés como cualquier mujer colombiana que nunca estuvo en las filas de las Farc.
“Muchas de las muchachas nunca tuvimos esa relación con los niños. Pienso que el cariño que podemos brindarles es más grande porque es un sueño que muchas tuvimos mientras estuvimos en la guerrilla”, manifestó Lucero, de 31 años.
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