Lo hacen por medio de un correo electrónico donde le exigen a la víctima consignar entre 1.000 y 8.000 euros (entre 3 millones y 27 millones de pesos, aproximadamente) en una cuenta bancaria para no publicar las imágenes en redes sociales, informó El País.
Según ese diario, el encuentro virtual con la modelo comienza “con una conversación subida de tono” y termina con el usuario masturbándose. En ese momento, explica el medio, el video se corta de forma abrupta y los delincuentes proceden a realizar la extorsión.
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De acuerdo con ese portal de noticias, el problema empezó en el año 2012 con la denuncia de un hombre en la ciudad de Alicante y, a partir de ahí, se han ido acumulando casos hasta superar las mil víctimas.
El Tribunal Supremo de España descubrió que, analizando los casos denunciados, el idioma utilizado por los extorsionistas siempre es el inglés. También encontraron similitudes en las frases que escribían en los correos electrónicos:
“¿Hay coincidencias incluso en el rigor literal de las fases utilizadas: “Debes pagar para salvar tu vida””.
Sin embargo, la labor de encontrar a los delincuentes ha sido difícil porque los sitios de internet, desde donde graban a los hombres, están registrados en Costa de Marfil y Marruecos.
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