Sean Donis vive en Nueva York, Estados Unidos, y el próximo 20 de septiembre deberá asistir a un juzgado de Rockland para recibir su sentencia. Fue denunciado por el amante de su ahora exesposa, por los delitos de allanamiento y vigilancia ilegal. De ser encontrado culpable, podría enfrentarse a una pena máxima de 15 años de cárcel, informó el New York Post.
Su desafortunada experiencia empezó cuando su esposa salió, según ella, a cenar con unas amigas. Mientras, él se quedó en casa con su hijo.
Todo transcurría con tranquilidad, hasta que Sean decidió utilizar su Ipad. Al no encontrarlo, activó la función ‘Find My iPhone’. Para su sorpresa, la aplicación le indicaba que el dispositivo se encontraba en camino a Rockland, así que decidió salir en su auto hasta el lugar, pues ya venía sospechando de una posible infidelidad, afirmó el mismo medio.
Al llegar, vio el carro de su esposa parqueado frente a una casa, así que se acercó a la residencia. Y, según él, la puerta estaba abierta. Cuando ingresó al lugar, la escena fue la que temía tiempo atrás , su esposa estaba teniendo sexo con el jefe.
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Sean, empezó a grabar con su celular y tras varios segundos, empezó a gritar: “¡Lo tengo todo en video! ¡Todo en video!… No puedo creerlo, Nancy. No me lo puedo creer”. Mientras su pareja trataba de esconderse bajo las sábanas le respondía, “Para. Por favor, para”, confirmó Playground.
Después del bochornoso momento, Sean decidió marcharse del lugar. La mujer le pidió el divorcio y en febrero de este año firmaron los papeles.
Pero cuando pensó que el momento amargo había terminado, llegó a su casa la notificación del juzgado. Sean se declaró inocente por los cargos que le atribuyen y se encuentra a la espera del próximo juicio, donde espera salir absuelto. “Siento que es injusto lo que me están haciendo. Es como si me estuvieran castigando dos veces”, dijo al New York Post.
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