- Explosivos con ingredientes de supermercado.
Habían adquirido destreza en especial en la elaboración de un explosivo altamente inestable hecho con ingredientes ampliamente disponibles.
Entre estos estaban decolorante de cabello (agua oxigenada) y quitaesmalte. Con ellos creaban una sustancia conocida como peróxido de acetona (triperóxido de triacetona, peroxiacetona,
Así lo documenta un informe del gobierno francés, revelado este domingo por el periódico ‘The New York Times’.
“La policía francesa encontró rastros de la misma fórmula explosiva en cada uno de los lugares de París en los que los atacantes detonaron sus chalecos”, dice el informe.
- Diversificación de blancos.
El otro aspecto que llamó atención fue el cambio de blancos. En los ataques anteriores, la organización terrorista Estado Islámico, autora de los atentados, había seleccionado blancos simbólicos, con claros nexos con Israel o intereses judíos.
Pero en París –según ‘The New York Times- siguieron el consejo de Boubaker al-Hakim, conocido como el padrino de los yihadistas franceses: “dejen de buscar blancos específicos. Golpeen a todos y a todo”.
El informe también documenta un cambio de estrategia en términos del tipo de ataque empleado. “En ataques previos, los combatientes del estado islámico habían optado por un solo modo de operación: o un tiroteo, o una explosión, o un intento de toma de rehenes. En París, los atacantes hicieron las 3 cosas al tiempo, dándose cuenta que de esta forma abrumarían la respuesta a emergencias del país”, dice ‘The New York Times’.
- Celulares desechables
De acuerdo con el periódico, en los ataques del 2014 y 2015 en Europa, los terroristas islámicos hicieron llamadas o enviaron mensajes no encriptados que fueron interceptados por la policía para neutralizarlos. “Pero los 3 equipos en París fueron comparativamente más disciplinados. Solo usaron teléfonos nuevos que luego desecharían, incluyendo varios activados minutos antes de los ataques, o teléfonos quitados a las víctimas”, dice ‘The New York Times’.
- Correos electrónicos encriptados
La policía no ha encontrado correos electrónicos relacionados con los ataques de París, lo que hace suponer que se empleó algún método para encriptarlos, que aún no ha sido descubierto.