El hombre conoció a su mamá luego de 30 años, pues era adoptado, y decidió divorciarse de su esposa por irse a vivir con su progenitora. La mujer tiene 51 años y él tiene 32; ambos dicen que tienen “muy buen sexo juntos” y no les importa el qué dirán, reporta el diario británico The Mirror.
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La pareja conformada por madre e hijo, de nombres Kim West y Ben Ford, sostiene que su relación no es incestuosa, sino que se trata de una “atracción sexual genética”.
Esta fue la portada del periódico New Day con la historia:
Kim y Ben viven en Michigan, Estados Unidos, donde el incesto es considerado un delito que puede dar condenas de cadena perpetua.
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