Las joyas ni siquiera estaban en los bordes, pues se supone que por allí se escurren objetos pequeños, sino que estaba en la tercera capa de espuma, dentro del cojín para sentarse, reporta el diario británico Metro.
Sin embargo, la sorpresa no fue inmediata, pues el sillón estuvo tirado en un desván, después de comprado, durante seis años, antes de que el hombre de la casa decidiera meterle mano, informa The Telegraph.
El romántico esposo esperó una ocasión especial y se decidió por elegir su aniversario de boda, día en el cual le obsequió a su esposa el anillo de diamantes, los aretes el día de San Valentín y el broche en la fecha de Pascua, informa Actualidad RT.
Temas relacionados: