“Quiero disculparme por no haber llamado antes. Quería contarles a mis hijos lo que había pasado antes”, dijo William Hager, de 86 años, cuando la policía llegó a su casa luego de haber sido alertados por una supuesta pelea, informa CNN.
Hager los llevó hacia la habitación, donde el cadáver de su esposa estaba cubierto con una cobija. Dijo que le había disparado en la cabeza mientras dormía.
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Según Hager, había estado pensando en matar a su esposa desde hacía algunos días debido a que ella tenía mucho dolor y ya no tenían dinero para pagar sus medicamentos. Agregó que ella le había dicho anteriormente que quería morir, pero que no le había pedido específicamente que la matara, añade el noticiero WPBF.
De acuerdo con WPTV, Hager, quien al parecer se había declarado en quiebra en 2011, fue encarcelado y enfrenta cargos por asesinato premeditado en primer grado.
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