“Me tomó mucho tiempo sentirme cómoda y aceptar mi nuevo cuerpo. Todos tenemos imperfecciones y hay mucha belleza en nuestros defectos. Las cicatrices y la piel injertada te dan carácter. No es lo que tienes, es lo que haces con lo que tienes lo que realmente cuenta”, escribió Copeland en la foto compartida en Facebook en la que aparece en biquini, tomada durante sus vacaciones en San Juan, Puerto Rico.
En Mayo de 2012, cuando tenía 24 años, Copeland sufrió una caída cuando saltaba con una cuerda sobre el río Tallapoosa, cerca de Atlanta, EE. UU. y sufrió una herida en la pierna que a pesar de ser tratada en un hospital, tres días después empeoró y comenzó a causarle mucho dolor, informa CNN.
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Copeland volvió al hospital, donde se enteró que tenía la llamada ‘bactería carnívora’, que no solo estaba consumiendo el tejido de su pierna, sino que también le causaba dificultad para respirar, problemas en los riñones y había reducido en un 90% la capacidad de su corazón de bombear sangre.
Para salvarla, los médicos tuvieron que amputarle la pierna izquierda, la derecha por debajo de la rodilla y ambas manos. De acuerdo con el New York Post, también tuvo que recibir terapia física y actualmente utiliza prótesis en sus piernas y manos.
Hoy en día Copeland acaba de terminar una maestría en trabajo social y desea abrir un centro comunitario holístico sin ánimo de lucro para personas con discapacidades.
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