“Tengo gente en mente en términos de vicepresidente. Solo que no he dado nombres. (…) Me gusta Marco. Me gusta Kasich. (…) Me gusta Walker en muchos sentidos. Lo he criticado mucho (…) pero siempre me ha gustado”, declaró el excéntrico millonario la noche del lunes al diario USA Today.
“Hay personas que me gustan pero no creo que ellas me quieran a mí porque las he criticado duramente”, agregó.
El magnate inmobiliario, nuevo en la política, dijo estar dispuesto a forjar nuevas alianzas, incluyendo a aquellos que lo han atacado durante las primarias.
John Kasich todavía aspira a la nominación republicana para la Presidencia estadounidense, pero está de tercero muy lejos de Trump y del senador texano Ted Cruz. Kasich, señaló en una entrevista en el programa CBS This morning, que no había ninguna probabilidad de que se aceptara ser vicepresidente del magnate.
Marco Rubio abandonó la carrera el 15 de marzo tras haber perdido las primarias en su bastión, Florida.
En cuanto al gobernador de Wisconsin Scott Walker, había abandonado en septiembre su aspiración a la Casa Blanca, tras lo cual dio su apoyo a Ted Cruz.