Mucho se ha hablado acerca de la cinematográfica fuga de la excongresista Aída Merlano, en lo que parecía ser una rutinaria visita al consultorio de un odontólogo en la capital colombiana.
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A partir de ello, la vida para su hija, Aída Victoria Merlano, cambió por completo. La joven, que en ese momento tenía 19 años, estaba allí cuando ocurrió la escapada de su madre, por lo que las autoridades creen que habría favorecido la fuga e instrumentalizado a su hermano Esteban, de 17 años en aquel entonces.
Con esa acusación, la ‘influencer’ recibió una condena en segunda instancia de 13 años y 10 días de prisión, pese a que hasta ese momento gozaba de prisión domiciliaria.
Merlano habló con Daniel Coronell y allí volvió a dar detalles sobre la fuga de la excongresista. Aunque esa versión se ha escuchado varias veces, llamó la atención la respuesta de la joven de 24 años cuando el periodista le preguntó sobre quiénes habrían sido cómplices de ese hecho.
La creadora de contenidos, con una evidente sonrisa nerviosa, respondió que “evidentemente no iba a hablar de cómplices”, porque a ella le “encanta respirar”:
“Te lo juro, amo vivir. Amo la vida. No quisiera yo, de repente, terminar en una zanja con un tiro en la frente”, expresó la ‘influenciadora’.
La joven también afirmó que prefiere “no hablar de gente que es terrible”, por lo que guardó silencio sobre los secuaces de su mamá en la fuga, pero dejó entrever que podría tratarse de importantes personalidades del mundo de la política: “Mi mamá, por la razón que se fuga, es porque su vida corría peligro”.
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