Eso le dijo el indiciado a la Fiscalía, que le imputó el delito de tentativa de homicidio por los hechos ocurridos el pasado 26 de noviembre (2016) en inmediaciones de una finca del barrio La Esperanza, en ese municipio.
Lo anterior, de acuerdo con un comunicado emitido por el ente acusador en el que explica:
“El detenido aseguró que el día en el que mutiló las manos al adolescente, salía en su moto rumbo a una finca en la que trabajaba. En el camino, supuestamente, un grupo de jóvenes lanzó un palo sobre la vía para impedirle el paso e intentar robarlo. Según el relato, uno de los presuntos asaltantes le disparó y por eso el hombre reaccionó amputándole las manos”.
Sin embargo, la autoridad investigativa rechazó ese argumento y refirió que el jovencito, de 16 años, presentaba múltiples heridas en el cuerpo con el arma blanca. Según Noticias Caracol, tenía lesiones en la cabeza y los brazos.
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Por lo que el hecho “encajaría a un caso de uso desmedido de fuerza y una agresión premeditada”. Además, asevera la Fiscalía que “las evidencias y los dictámenes médicos legales indicarían que la intención del agresor era acabar con la vida del menor de edad”.
Frente a estas acusaciones y pese a los argumentos de Zapa Rocha, un juez de control de garantías de Arjona le dictó medida de aseguramiento en la cárcel de Valledupar, donde tendrá esperar el juicio condenatorio.
Por su parte, el menor lesionado perdió sus dos manos, pues los especialistas que lo atendieron no lograron reimplantarlas.
Entre tanto, el ente investigativo señaló que el acusado fue capturado en el municipio de Copey (Cesar), donde presuntamente se escondía de las autoridades.
A continuación, un video difundido en Facebook por la página ‘Cartagena en vivo’ en el que se aprecia al adolescente pedir que su agresor responda por el violento hecho.
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