En estos se menciona unas de las posibles razones que habrían motivado el supuesto suicidio de Nicol Garzón —aún no confirmado por las autoridades, que no descartan otras hipótesis sobre esa muerte—. Por ejemplo, en algunos de los relatos de las compañeras de colegio de la niña, recolectados y publicados por El Tiempo este miércoles, se indica que ella quizás tomó esa decisión por el maltrato de sus papás. Una contó:
El día que murió, se puso a llorar en el descanso; decía: ‘No quiero llegar a la casa’ y que la mamá le iba a pegar muy duro [porque había perdido dos materias]. Pensaba que esta vez le iban a pegar la mamá y el papá. Ella contaba que si no sacaba cinco, la mamá le pegaba con ortigas, con la chapa de la correa, y los papás la amenazaban con que si le decía a alguien, le pegarían más duro”.
Las compañeritas, citadas por el periódico, también recordaron que, ese 8 de junio, Nicol estuvo dispersa en clase y que después se despidió de ellas como presintiendo que no se verían nunca más:
Estaba triste y en el descanso nos dijo que prefería estar sola. Luego, en educación artística, miss Bibiana nos pidió un dibujo de frutas, animales y ropa. Nicol dibujó el cielo y lo llenó de escarcha y estrellitas. Fue la única que no dibujó lo que nos pedían. [Era como si Nicol se viera ya en el cielo. Más adelante,] cuando yo me iba a la ruta, me dijo: ‘Chao compañera, yo me despido porque de pronto no nos volvemos a ver’”.
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Otras alumnas agregaron al diario que creen que Nicol quizás no intentaba quitarse la vida y que, si pensó en ahorcarse, era porque le gustaban las películas de terror. “De pronto solo se trató de lastimar para que le prestaran atención. Su hermana tuvo apendicitis y la mamá siempre estaba muy pendiente de ella. Yo creo que solo quería que su mamá también estuviera igual de pendiente”, dijo una.
Por su parte, los padres de Nicol han culpado del suicidio de su hija al colegio El Cerro de Chía y a la profesora Bibiana Pantoja, pues, dicen, le hacía ‘bullying’ a la pequeña y la llamaba “gorda”.
La docente siempre se ha defendido de esas acusaciones e incluso días después de la muerte de su estudiante aseguró a Noticias Caracol:
Hoy el salón está muy triste, estamos muy dolidos por lo sucedido. Sus compañeros la querían mucho e igualmente para mí era una alumna especial […] En ningún momento aquí en el colegio se presentó algún problema con ella. Siempre andaba en grupo con otras niñas. Era muy alegre”.
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