La nueva víctima del asbesto en Colombia le contó a Noticias Caracol, en febrero de 2017, que aunque cumplió con las normas de seguridad en sus más de 25 años de trabajo de todas formas este material invadió su cuerpo y le produjo una grave enfermedad.
“Siempre tuve contacto con tejas, tanques, tubería y cerámicas que tenían asbesto”, explicó Buitrago en ese momento.
La mujer dijo al noticiero que le habían diagnosticado “mesotelioma pleural maligno (tumor del tejido que recubre pulmones y estómago)”, pero que aun así quería continuar con el legado que había dejado Ana Cecilia Niño, otra víctima del asbesto que murió en enero de 2017.
Niño se caracterizó por tomar la vocería de las personas víctimas de esta fibrilla mortal y demandó al Estado, lo que la convirtió en un símbolo de quienes exigen que se prohíba el uso de este material en el país.
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Sin embargo, no logró su objetivo ya que en junio de 2016 la Comisión Séptima del Senado “hundió un proyecto de ley que buscaba prohibir la producción, comercialización, exportación, importación y distribución de cualquier variedad de asbesto en Colombia”, reseña El País de Cali.
Una de las razones por las que esta iniciativa no ha prosperado se debe, según el columnista de El Espectador Óscar Sevillano, a que la justicia y el Estado “se inclinan por hacerle venías a los intereses de particulares que pagan gruesas sumas de dinero para que firmas de abogados, como la del señor Fiscal General” las defiendan.
“(…) En Colombia tenemos un Congreso de la República que hunde en siete ocasiones los proyectos de ley que han buscado la prohibición de materiales como el asbesto ante el intenso lobby de la empresas y de algunos congresistas cercanos a esta industria (…)”, advierte el columnista.
Esto, pese a que el ministro de Salud, Alejandro Gaviria, dijo en febrero al noticiero que estaba “a favor de la prohibición del asbesto”.
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