Y les pidió a los jóvenes que dejen de jugar, entre otras cosas, porque asegura que estos títulos promueven un estilo de vida “vegetativo”.

La petición del Sumo Pontífice se dio durante su visita a Polonia, en donde elevó la crítica sobre los videojuegos, en la que también asegura que van en contra de la religión, que promueve que los seres humanos dejen una marca en el mundo, y no un estilo de vida “fácil” y limitado a estar sentado en un sofá, cita The Independent.

Además de los videojuegos, el papa Francisco se refirió a los computadores como promotores también de ese estilo vegetativo.

Pese a que no se refirió a un videojuego en particular, la petición del máximo jerarca de la iglesia Católica estaría relacionada con el éxito alcanzado por Pokémon GO, título que se convirtió en un hito en el mundo virtual (y real) y que ha dejado en un punto muy alto a Nintendo, uno de sus propietarios.

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