La mujer, que reside actualmente en Tailandia, asegura que desde que inició con esta práctica el bienestar de su cuerpo ha sido evidente, incluso dice que su ciclo menstrual y los dolores de esos días han disminuido, según afirmó el portal Playground.
Chrystal sabe que sus afirmaciones no son avaladas por ningún ginecólogo o especialista en el tema. Pero ella se basa en la experiencia que le ha proporcionado beber la sangre de su menstruación.
En la entrevista concedida a sitio, indica que la sangre no se debe concebir como algo sucio. Al contrario, la describe como “una cosa hermosa y sagrada”. También afirma que los ciclos menstruales no deben ser superiores a 3 días, pues las mujeres estarían perdiendo nutrientes y energía vital para el cuerpo.
Según la profesora de yoga, debemos reeducar nuestro cuerpo haciéndole entender que la menstruación es algo sagrado y no queremos perder tanta sangre. Chrystal no utiliza tampones, ni toallas higiénicas, pues dice que no le permiten tener contacto con su ciclo de forma natural. Para esos días utiliza la copa menstrual, con la que puede analizar de cerca la cantidad, el color y aspecto del flujo.
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Para introducirse en la práctica de beber la sangre, recomienda ir poco a poco. “Al principio me parecía un poco desagradable, así que sólo me chupaba un dedo”, dijo a Playground. Con el paso del tiempo empezó a mezclarla en batidos y ahora la consume directamente de la copa menstrual.
Como no todos ven con buenos ojos esta experiencia, la mujer lo compara con comer carne animal. “Cuando comemos carne de algún animal ingerimos su sangre, así que ¿por qué no vamos a tomar la nuestra?”. No se arrepiente de su actuar, y al contrario dice que ahora se siente más viva que nunca y en armonía con su propio ser.
En este video puede verse cómo Maanee Chrystal bebe su propia menstruación:
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